Desde que el Gobierno socialista se convirtió en el propietario de todas las casas parisinas, las entregó a los arquitectos con la orden [...] de dotarlas de calles-galería [...]. En el primer piso, en cada casa, tomaron las estancias a la calle quitando los tabiques intermedios; después abrieron unos amplios vanos en los distintos muros medianeros, obteniendo unas calles-galería de la anchura y altura habituales al interior de una habitación, las cuales ocupaban de este modo toda la longitud de una manzana. En los barrios nuevos, en los que normalmente las casas contiguas suelen tener los pisos más o menos a la misma altura, la solera de las galerías pudo ser nivelada con bastante regularidad [...]. Pero en las viejas calles hubo que alzar o rebajar muchas soleras, y a menudo debieron resignarse a dar al suelo una fuerte inclinación o cortarlo con unos escalones. Cuando todas las manzanas de las casas se vieron atravesadas de este modo por unas galerías que ocupaban [...] la totalidad del primer piso, ya no hubo sino que unir unos con otros esos tramos dispersos, de modo que formaran una red [...] hasta abarcar toda la ciudad. Cosa que se hizo fácilmente al establecer en cada calle unos puentes cubiertos [...]. Otros puentes bastante similares, pero mucho más largos, se tendieron en los bulevares, como en el espacio de las plazas, y hasta en cada uno de los puentes que atraviesan el Sena, con lo que [...] un paseante podía recorrer toda la ciudad sin ponerse jamás al descubierto [...] Desde el momento en que los parisinos probaron estas nuevas galerías, no quisieron ya poner los pies en las antiguas calles que, según decían, eran tan sólo buenas para perros
T. Moilin
Paris en l???an 2000