libre
Compatriotas y amigos […], si hubiera alguno en toda esta asamblea que profesara a César su amistad, a él le digo que el amor de Bruto hacia César no fue menor que el suyo. Y si ese amigo preguntase por qué Bruto se ha alzado contra César, ésta sería mi contestación: ‘No porque amara a César menos, sino porque amaba a Roma más’. ¿Preferiríais que viviera César a cambio de morir todos esclavos a que esté muerto César y vivir libres? Porque me apreciaba, yo lo lloro; por afortunado lo celebro; lo honro como valiente, pero por ambicioso lo maté. Lágrimas hay en mí para su afecto como júbilo para su fortuna, honra sin duda por su valentía, pero muerte frente a su ambición. ¿Quién aquí hay tan abyecto que acepte y quiera ser esclavo? ¡Si hay alguno, que hable! ¡Le he ofendido! […] ¿Quién tan vil que no ame a su patria?
Julio César
La justicia es virtud que se diría plebeya y humilde que se arrastra bastante por debajo de los tronos reales, o quizá, mejor dicho, hay dos justicias: una justicia buena para el pueblo, que sobrevive puesto de rodillas y que, estando cargado de cadenas, no puede saltar el muro que lo encierra, y otra, la justicia de los príncipes, que es más noble que la de los plebeyos y más libre en sus movimientos, una para la cual viene a ser lícito simplemente todo cuanto quieran
Utopía
El Estado de Francia en esa época consistía en un conglomerado de privilegios contradiciendo toda idea, y hasta la razón en general, una más que absurda situación de una corrupción descomunal, un auténtico reino de injusticia. La opresión terriblemente dura que ejercía su peso sobre el pueblo, las dificultades del gobierno para garantizar a aquella corte los medios que le eran necesarios a su lujo y prodigalidad daban ocasión al descontento. El nuevo espíritu empezó a actuar: la opresión dio paso al libre examen. Y se hizo evidente que las enormes sumas arrancadas cada día al sudor del pueblo no eran realmente dedicadas a los fines propios del Estado, sino derrochadas locamente. Así, todo el sistema del Estado fue visto como injusta iniquidad
Nuevos enemigos se alzan
a atar nuestras almas con cadenas de siglos:
ayúdanos a salvar la libre Conciencia de las garras
de esos lobos a sueldo cuyo Evangelio es su vientre
To the Lord General Cromwell, soneto, mayo de 1652
Todos los gobiernos que subsisten hoy día, al igual que aquellos de los cuales la Historia nos guarda algún recuerdo, se fundan en la usurpación o en la conquista o en una y otra al mismo tiempo, sin que sea posible pretextar por parte del pueblo ningún tipo de libre aceptación ni sujeción que sea voluntaria
Escritos políticos
El legislativo, en su prudencia cuando se ejerce en calma y libremente, se asemeja a un gran río majestuoso que va haciendo avanzar, siempre pacífico, el caudal de sus aguas a través de los valles que fecunda. Mientras que el poder ejecutivo, abandonado en manos de uno solo, se asemeja a un torrente aterrador que, tras haber partido de su fuente, se oculta debajo de la tierra para mostrarse luego desbordando fieramente su lecho y amontonar sus olas con estruendo y derribar así cuanto se oponga a su curso brutal e impetuoso. De ahí vienen los males espantosos que provoca esa forma de gobierno desde hace tanto a la humanidad
Les Chaînes de l???esclavage
Para lograr mantenerse libre, nunca debe el pueblo consentir el que alguien pueda eludir la ley: pero muy a menudo es el primero en violarla a favor del que venera
Les Chaînes de l???esclavage
Las fiestas de la libertad han de ser fiestas libres, como ella
Deliberaciones del Cuerpo Municipal, París, 11 de abril de 1792
Al no ser la Soberanía sino como tal el ejercicio de la voluntad general, no puede alienarse en ningún caso, tal como, no siendo el soberano sino un ser colectivo, sólo por sí puede ser representado. […] En cuanto un pueblo se da Representantes deja de ser libre y ya no existe
Oprimió a una nación libre. Abusó de sus leyes. Se declaró como su enemigo. ¿No le pasó revista a las tropas antes del combate? ¿No huyó, en lugar de impedirles tirar? ¿Qué hizo con objeto de evitar el furor criminal de sus soldados? Debe morir para asegurar el reposo del pueblo
Discursos a la Convención sobre el juicio al rey, 13-11-1792 y 27-12-1793
El pueblo no tiene interés en hacer la guerra. El ejecutivo encuentra en ella, al contrario, el aumento de su crédito, dado que le ofrece mil diversos medios de practicar la usurpación. Por eso mi intención es proponeros que el ministerio militar, desligado del ejecutivo, no dependa sino de vosotros y os quede sometido de inmediato. Si queréis que vuestra institución sea realmente duradera en un pueblo que ya no tiene órdenes, evitemos que la magistratura se encamine hacia una nueva orden, una especie de nuevo patriarcado, al dirigir las armas y el ejército libremente, según su voluntad. Pues la guerra no tiene ningún freno ni una regla fijada en unas leyes, con lo cual, en sus avatares, siempre se conforman sus acciones como actos de pura voluntad. Es preciso que no haya en el Estado más que una sola voluntad, y que la voluntad que hace las leyes dirija las acciones de la guerra
Discurso a la Convención sobre el Ministro de la Guerra, 28-1-1793
Las revoluciones verdaderas no se hacen a medias. Ya que parecéis predestinados a hacer cambiar de rostro los gobiernos de Europa, no descanséis hasta que sea libre. Su libertad es garante de la vuestra
Discurso a la Convención sobre el ejército, 12-2-1793
La patria de un pueblo libre se halla abierta a todos los hombres de la tierra
Proyecto para la Constitución
La espada debe estar sobre el abuso. Que todo sea libre en la república excepto aquellos que gobiernan mal y los que conjuran contra ella
Informe sobre la necesidad de declarar el Gobierno Revolucionario hasta la paz, 10-10-1793
La justicia hace iguales a los hombres; es garantía del gobierno libre
Informe sobre las facciones en el extranjero, 13-3-1794
Las instituciones son la garantía del gobierno de un pueblo libre […], asientan el reino de la justicia […], son garantía de la libertad
Fragmentos póstumos
La idea de reforma de la vida ocupaba a tal punto a los artistas y a los proyectistas de aquel tiempo como se puede ver analizando el extraño proyecto de la “Oikema”. Dicha construcción, ya sorprendente en su aspecto exterior, muy alargada, dotada de un propíleo antiquizante y un poderoso muro sin ventanas, debía ser el lugar que preparase el avanzar hacia una nueva ética en los terrenos de lo sexual. Para alcanzar el objetivo de una moral sexual perfeccionada, el contemplar las desviaciones y delirios humanos en la “Oikema” –es decir, en la casa sin frenos ni tabúes al deseo–, orientaría a los observadores sin duda en dirección a la virtud y hacia el “altar del himeneo”. Pero después concluye el arquitecto que sería quizá mucho mejor [...] “que la Natura opere a su capricho” [...]. Así, en esa “Oikema” que Ledoux emplazaba en el más bello paisaje, debería encontrar realización una forma más libre y renovada de la institución matrimonial
Von Ledoux bis Le Corbusier. Ursprung und Entwicklung der autonomen Architektur
Ha llegado la hora para el viejo tipo de familia. Pero la culpa no es del comunismo: es resultado del cambio experimentado en las actuales condiciones de vida. La familia ha dejado de ser una necesidad para el Estado, tal como lo era en el pasado. […] De las ruinas de la vieja vida familiar, veremos surgir una […] forma de familia que supondrá relaciones diferentes […] que se basen en la unión de afectos; […] una unión entre dos personas iguales […], trabajadoras, libres, e independientes una y otra
El Estado hará comprar los negros de las costas de África para transportarlos a colonias, donde, acto seguido, serán libres: se les darán tres acres de tierra y las herramientas necesarias para proceder a cultivarlos
Fragmentos póstumos
Los hombres hacen lo que es su propia historia, pero no a su completa voluntad, en circunstancias elegidas libremente; bien al contrario, éstas se las encuentran hechas, terminadas, dadas como herencia del pasado. La tradición de las generaciones muertas carga como una pesadilla sobre el cerebro de los vivos. Y cuando parecen ocupados en transformarse y cambiar la realidad creando algo totalmente nuevo, a saber, justamente en el momento de una crisis revolucionaria, comienzan a evocar ansiosamente y a llamar al rescate a los manes de sus antepasados, para ir tomando entonces de ellos nombres, atavíos y consignas, representando la nueva pieza histórica con lenguaje prestado y venerablemente travestidos. Así cubrió Lutero sus facciones con la máscara del apóstol Pablo, mientras la Revolución de 1789-1814 se disfrazó de modo alternativo como República romana y como Imperio, y la revolución del 1848 no supo encontrar nada mejor que parodiar en unas ocasiones el 1789, y en otras en cambio la tradición revolucionaria del 1793-1795
El Dieciocho Brumario de Luis Bonaparte
No es posible madurar para la libertad si uno no está ya antes liberado (es preciso ser libre para poder servirse con provecho, en libertad, de las propias fuerzas)
La Religión en los límites de la mera razón
En un pueblo libre, la razón en verdad se encuentra efectivamente realizada
Fenomenología del espíritu
Parábola de Buda sobre la casa en llamas
Enseñaba Gautama
el saber de la rueda del deseo
donde estamos atados, sugiriendo
borrar toda ansiedad y aspiración
para entrar sin pasiones en la nada
que llamaba Nirvana.
Los discípulos entonces preguntaron:
“¿Cómo es, Maestro, esa Nada?
Porque todos estamos decididos
a abdicar del deseo, cual sugieres.
Mas, para ello, dinos si esa Nada
en la que debemos adentrarnos
equivaldría a la unificación
absoluta con todo lo creado
si, ligeros de cuerpo,
libres de pensamientos, indolentes,
flotamos sobre el agua, al mediodía;
o si, estando sumidos en el sueño,
inconscientes de todo, sin embargo,
nos cubrimos de nuevo con la manta.
Dinos pues si esa Nada es algo alegre,
si es buena o, al contrario, si tu Nada
no será sino nada,
frío y vacío sin significación”.
Calló entonces el Buda mucho rato
hasta, por fin, decir, indiferente:
“Nada que responder a esa pregunta”.
Pero luego, a la noche,
cuando aquellos ya se habían ido,
bajo el árbol del pan sentado, el Buda,
a los que nada habían preguntado,
les expuso por fin esta parábola:
“Vi hace poco una casa. Estaba ardiendo.
Comenzaban las llamas a lamer
ya los techos. Entré. Aún había gente.
Fui de nuevo a la puerta y, desde ella,
los llamé a grandes voces, advirtiendo
que ya ardía el tejado,
que salieran de allí a toda prisa.
Pero no parecían apurarse.
Uno me preguntó, mientras el fuego
comenzaba a chispearle entre las cejas,
cómo se estaba afuera, si llovía,
si quizá no soplaba mucho viento,
si habría otra casa,
y otras muchas cuestiones semejantes.
Sin responderle nada, salí afuera.
Éstos, pensé, arderán,
antes de terminar con sus preguntas.
En verdad os digo, amigos,
que aquél al que el fuego no le queme
como para querer cambiar de sitio
y prefiera quedarse ahí, ardiendo,
a ése nada tengo que decirle
Svendborger Gedichte, 1939
Los grandes no podrían dejar libre a uno que conoce la verdad, ni aunque sea la de las estrellas más lejanas.
Galileo Galilei
¡A las armas! ¡La patria está en peligro! […] Ciudadanas de París, descendientes de las mujeres de la gran Revolución que, en nombre del pueblo y la justicia, marcharon sobre Versalles y trajeron cautivo a Luis XVI, nosotras, madres, mujeres y hermanas del pueblo francés, ¿continuaremos soportando que la ignorancia y la miseria hagan a nuestros hijos enemigos? ¿Que se mate el padre contra el hijo y los hermanos se maten entre sí por capricho de nuestros opresores que buscan la destrucción de la ciudad tras haberla entregado al extranjero? ¡Ciudadanas, llegó la hora decisiva! ¡Queremos ser libres! ¡Hay que acabar con el viejo mundo!
Appel aux citoyennes de Paris firmado por �??Un grupo de ciudadanas�??, en el Diario Oficial de la República Francesa bajo la Comuna, 11 de abril de 1871
Nuestro dogma procede del Sinaí de la gran Revolución; grande porque fue reveladora; grande, menos que por lo hecho que por lo dicho. Quien se pretende demócrata data su origen en la Declaración de los Derechos Humanos. Realmente, nadie la rechaza, e incluso son los liberales quienes más hablan del 1789. Bien, pero, ¿qué dice? Dice «libres e iguales».
El significado de la Comuna se evidencia en lo que Marx llamó ‘la auténtica medida socialmente efectiva de su ser’: su desplazamiento de lo político hacia aspectos aparentemente periféricos de la vida cotidiana—la organización del espacio y el tiempo, los cambios en los ritmos de vida y los ambientes sociales. El breve dominio de su propia historia por parte de los insurgentes se percibe, no tanto en el nivel del gobierno político sino en la vida cotidiana: en problemas del mundo del trabajo, del tiempo libre y de la vivienda, de la sexualidad y las relaciones familiares y vecinales.
The Emergence of Social Space: Rimbaud and the Paris Commune
Hay un momento en que el funcionamiento de la máquina se vuelve tan odioso, hiere tanto, que no se puede ya participar, ni tan siquiera de forma pasiva. Poned los cuerpos en ruedas y engranajes, sobre palancas y sobre mecanismos, ¡tenéis que conseguir que se detenga! Hacedles ver a quienes la controlan, hacedles ver a quienes las poseen que, a menos que seáis libres, ¡la máquina no funcionará!sa
�??Bodies upon the gears�?� (discurso) 1964
Siempre creí falso el nombre que nos dan: emigrantes.
Es decir, expatriados. Mas nosotros
no hemos abandonado nuestra tierra a partir de una libre decisión
escogiéndonos otra. Ni salimos
de un país con deseo de quedarnos
para siempre en él, si nos dejaran.
Sino que hemos huido. Somos expulsados, desterrados,
y la tierra donde nos acojan
no una patria ha de ser, sino un exilio.
Nos sentamos inquietos [...]
a la espera del día del regreso, [...] oteando más allá de las fronteras. [...]
Escuchamos los gritos
que llegan hasta aquí desde sus campos,
y hasta nosotros mismos
somos como los ecos de los crímenes
que llegan desbordando las fronteras.
Cada uno de los que entre nosotros
entre la muchedumbre
lleva los zapatos destrozados
testimonia con ello la vergüenza
que está ahora manchando nuestra tierra.
No nos quedaremos para siempre
aquí, no. No está dicha
todavía la última palabra
�??Acerca del nombre de �??emigrantes�??�?�
¡Mujer, despierta, conoce tus derechos! […] Mira que el hombre esclavo, que ha aumentado su fuerza, ha necesitado de la tuya para poder romper con sus cadenas pero, una vez libre, se ha hecho injusto con su compañera. ¡Oh, mujeres, mujeres!, ¿cuándo saldréis de vuestra ceguera? ¿Qué ventajas habéis obtenido de la Revolución?
�??Postambule à la Déclaration des Droits de la Femme et de la Citoyenne�?�, 1791
Caballeros, vosotros, que queréis someternos a la esclavitud, ¿no habéis jurado respetar la Constitución francesa? […] Y, ¿cuál es la ley fundamental? ¿Olvidásteis vuestro compromiso con respecto a la Declaración de los Derechos del Hombre, en donde se dice que los hombres nacieron libres e iguales en derechos, y que sus derechos naturales incluyen la libertad, la propiedad, la seguridad y la resistencia a la opresión? Pero dado que no podéis negar el haber jurado todo eso, el derecho está de nuestra parte, como de la vuestra está el perjurio. Vuestros decretos han reconocido que los hombres son libres y que todos lo son, sin excepción, pero queréis mantener la servidumbre de seres humanos que os permiten tener y disfrutar de lo que son vuestras posesiones.
J-F. Biassou y T. L�??Ouverture ante la Asamblea General, 1792