institución
Una sociedad que se instituye debe sacralizar el hecho mismo de lo que es dicha institución
La Fête révolutionnaire
La escuela y la fiesta son las dos institutrices de la Nación
Fragmentos sobre las Instituciones republicanas
No es la palabra la que ahí pinta el cuadro, son las cosas mismas las que deben golpear el ojo, penetrar el alma. Todo en la fiesta debe ser acción
Opinión sobre el segundo proyecto presentado por la Comisión de Instituciones republicanas, 19 mesidor, revolución francesa, año VI
Si los hombres, en estado natural, nacen todos iguales en derecho, de hecho en cambio no nacen iguales, dado que la fuerza y el instinto, que también vienen por naturaleza, establecen entre ellos una gran desigualdad de suerte, pese a la igualdad en los derechos; mas su reunión y sus instituciones no pueden tener otro objetivo que mantener de hecho esa igualdad en el derecho, protegiendo al débil de la opresión del fuerte, y sometiendo así la industria de unos a la común utilidad de todos. El error más funesto y más cruel en que ha caído la Constituyente, al igual que la Legislativa y, por fin, que la Convención, al seguir en esto servilmente a los legisladores diferentes que las han precedido, es no haber señalado límites al derecho de propiedad y abandonar al pueblo a las especulaciones ávidas del rico
Manifeste des plébeiens
El pueblo no tiene interés en hacer la guerra. El ejecutivo encuentra en ella, al contrario, el aumento de su crédito, dado que le ofrece mil diversos medios de practicar la usurpación. Por eso mi intención es proponeros que el ministerio militar, desligado del ejecutivo, no dependa sino de vosotros y os quede sometido de inmediato. Si queréis que vuestra institución sea realmente duradera en un pueblo que ya no tiene órdenes, evitemos que la magistratura se encamine hacia una nueva orden, una especie de nuevo patriarcado, al dirigir las armas y el ejército libremente, según su voluntad. Pues la guerra no tiene ningún freno ni una regla fijada en unas leyes, con lo cual, en sus avatares, siempre se conforman sus acciones como actos de pura voluntad. Es preciso que no haya en el Estado más que una sola voluntad, y que la voluntad que hace las leyes dirija las acciones de la guerra
Discurso a la Convención sobre el Ministro de la Guerra, 28-1-1793
Las instituciones son la garantía del gobierno de un pueblo libre […], asientan el reino de la justicia […], son garantía de la libertad
Fragmentos póstumos
La idea de reforma de la vida ocupaba a tal punto a los artistas y a los proyectistas de aquel tiempo como se puede ver analizando el extraño proyecto de la “Oikema”. Dicha construcción, ya sorprendente en su aspecto exterior, muy alargada, dotada de un propíleo antiquizante y un poderoso muro sin ventanas, debía ser el lugar que preparase el avanzar hacia una nueva ética en los terrenos de lo sexual. Para alcanzar el objetivo de una moral sexual perfeccionada, el contemplar las desviaciones y delirios humanos en la “Oikema” –es decir, en la casa sin frenos ni tabúes al deseo–, orientaría a los observadores sin duda en dirección a la virtud y hacia el “altar del himeneo”. Pero después concluye el arquitecto que sería quizá mucho mejor [...] “que la Natura opere a su capricho” [...]. Así, en esa “Oikema” que Ledoux emplazaba en el más bello paisaje, debería encontrar realización una forma más libre y renovada de la institución matrimonial
Von Ledoux bis Le Corbusier. Ursprung und Entwicklung der autonomen Architektur
La igualdad perfecta es en sí de derecho primitivo; el pacto social, lejos de atacar a ese derecho natural, debe dar a cada individuo la garantía de que ese derecho nunca será violado, que desde aquel momento no hubiera debido haber instituciones que favorecieran la desigualdad y la codicia, permitiendo que aquello que es para unos necesario pueda ser secuestrado para ser lo superfluo de los otros. […] La rebelión de pobres contra ricos se convierte así en necesidad
Manifeste des plébeiens
Si París pudo resistir fue porque, a consecuencia del asedio, se había deshecho del ejército, sustituido por una Guardia Nacional cuyo contingente principal ahora lo formaban los obreros […]. El primer decreto de la Comuna suprimía el ejército permanente, sustituyéndolo por el pueblo armado. La Comuna estaba conformada por los consejeros municipales elegidos en cada distrito mediante sufragio universal, todos responsables y revocables en todo momento. […] Desde los Consejeros para abajo, todos los cargos públicos debían ejercer su trabajo con salarios obreros […]. Como los restantes funcionarios, todos los magistrados y jueces eran revocables y electivos […]. Formada la Asamblea Nacional, los delegados serían igualmente todos revocables y electivos, sometidos a mandato imperativo de sus respectivos electores. […] Entre las reformas laborales, se suprimieron las multas de la empresa impuestas directamente a los obreros, y se prohibieron ciertos tipos de trabajos nocturnos. En lo que hace a la educación, todas las instituciones de enseñanza fueron abiertas gratuitamente al pueblo y emancipadas de la Iglesia –se eliminó la subvención del culto y quedó separada del Estado–
La guerra civil en Francia
Sólo consideramos esencial y efectivamente derecho el llamado derecho civil o económico. Tras la primacía de dicho derecho, en el derecho constitucional se incluye el ordenamiento del Estado, es decir, el derecho público correspondiente a la economía. Viene a continuación el derecho penal, instrumento auxiliar para la conservación del orden político y social establecido, y las instituciones y las normas que con él están relacionadas
La función revolucionaria del Derecho y el Estado
Uno de los motivos que aparecen con mayor insistencia en los movimientos revolucionarios europeos a lo largo del siglo XVII, aunque sea a través de remitirse a las tradiciones e instituciones del pasado, es la petición de paridad de representantes del pueblo y la nobleza a nivel nacional y ciudadano. Un motivo que tiene como origen un análisis crítico de las jerarquías existentes. Una revisión de las funciones de los estratos sociales y la relación de gobierno y sociedad cuya elaboración conceptual hunde firmemente sus raíces en la revolución dada en la ciencia y el debate teórico-político que acompaña las luchas religiosas a mediados del siglo XVI
Ribelli e riformatori dal XVI al XVIII secolo
Ciertamente pueden distinguirse una violencia muerta y una viva, pero no por ello la primera viene a ser menor que la segunda; puede incluso ser mucho más temible, dado que se camufla tras la máscara de las costumbres y las instituciones. De modo que los que nos recomiendan o la retirada o la abstención no hacen otra cosa que inclinarse realmente ante ella
Combats avec Méduse
Cualquiera que intente derrocar unas instituciones opresivas, ya se haya o no comprometido en un acto […] ilegal, se convierte a priori en criminal [...]. El delito de ese prisionero es su audacia política, su obstinada denuncia—hecha en forma legal o extralegal– de los errores sociales que fomenta el Estado.
�??Political Prisoners, Prisons and Black Liberation�?�